Política

Liberaron a Pablo Ventura por el caso de Fernando Báez

Los policías siguieron una características de uno de los acusados: su rodete. Llegaron a la casa y no tenían suficientes esposas. Las zapatillas con sangre y los dichos de una vecina que llevaron a la detención de Pablo Ventura, que ayer se comprobó que no estaba en Villa Gesell

  • 22/01/2020 • 07:47

Desde el sábado, tras el asesinato a golpes de Fernando Báez Sosa, de 18 años, en Villa Gesell, que las razones que llevaron a los investigadores de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) local a levantar un teléfono y pedirle a sus colegas en Zárate una detención de urgencia a casi 500 kilómetros de distancia, fueron un misterio.

Lo cierto es que la historia del detenido número 11, Pablo Ventura, un remero de 21 años que fue liberado ayer por la noche, tras cuatro días detenido, comenzó con una persecución a pie por las calles de Villa Gesell y un mal chiste interno que los otros 10 detenidos, repitieron una vez más esa mañana después del crimen.

Desde el sábado, tras el asesinato a golpes de Fernando Báez Sosa, de 18 años, en Villa Gesell, que las razones que llevaron a los investigadores de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) local a levantar un teléfono y pedirle a sus colegas en Zárate una detención de urgencia a casi 500 kilómetros de distancia, fueron un misterio.

Lo cierto es que la historia del detenido número 11, Pablo Ventura, un remero de 21 años que fue liberado ayer por la noche, tras cuatro días detenido, comenzó con una persecución a pie por las calles de Villa Gesell y un mal chiste interno que los otros 10 detenidos, repitieron una vez más esa mañana después del crimen.

El sábado una delegación de la DDI de Zárate llegó a la casa de los Ventura en esa localidad. Los policías preguntaron por Pablo, lo trasladaron a una dependencia y allí le informaron que estaba detenido por el crimen de Báez Sosa.

Ventura fue llevado a Villa Gesell y la primera decisión judicial fue que quede detenido separado de los otros 10 acusados para evitar cualquier agresión o inconveniente. Ventura fue alojado en la DDI mientras que cinco imputados estaban en la comisaría 2 de Gesell y los otros cinco en la 1 de Pinamar.

Desde un primer momento el padre de Ventura y su abogado, Jorge Santoro, dijeron que el chico estuvo el viernes a la noche y el sábado a la madrugada en Zárate. Para sostener sus dichos llevaron el video del restaurante “La Querencia” donde se ve a Pablo, a su padre y su madre cenando. También viajaron tres testigos. Una chico y una chica que dijeron que después de la comida estuvieron con él en un departamento y una vecina que testificó que lo vio llegar a su casa a las cinco de la mañana. Era la misma hora en la que los rugbiers ya habían matado a Báez Sosa y volvían a la casa en la que iban a ser detenidos.

Ventura fue indagado el lunes durante 45 minutos y declaró que cuando se cometió el crimen estaba en Zárate. La fiscal Verónica Zamboni comenzó a trabajar para corroborar las pruebas que la familia había llevado. Los resultados fueron que Pablo estaba en su ciudad.

Otra prueba determinante es que ni las cámaras de seguridad del boliche Le Brique, ni las municipales ni la del supermercado que tomó a cinco acusados, registraron a Ventura. Y un cuarto elemento es que en el contrato de alquiler de la casa no figura Pablo Ventura. El dato de esa prueba es que en la documentación sí está el nombre de otro joven que nunca llegó a Gesell, por lo que iban a 11 amigos en la vivienda. Pero no Pablo Ventura.

La familia había pedido otra medida de prueba. Que se pida a la empresa Movistar la ubicación del teléfono de Pablo el viernes a la noche para comprobar que impactaba en las antenas de Zárate. Esa diligencia fue ordenada por la justicia pero todavía no llegó el resultado.

Pero los elementos que tenía la causa ya era contundentes de que el joven no había estado en Villa Gesell cuando fue asesinado a golpes Báez Sosa. Así, la fiscal Zamboni le pidió al juez Mancinelli que le dicte la falta de mérito a Ventura y lo libere. Y eso hizo el magistrado ayer cerca de las 20 horas